×

6 trucos para cuidar la flor de Pascua como un experto esta Navidad

Con el cuidado y la atención adecuados, tus poinsettias brillarán con luz propia estas fiestas y llenarán de vida y color el invierno aragonés

Con el cuidado y la atención adecuados, tus poinsettias brillarán con luz propia estas fiestas y llenarán de vida y color el invierno aragonés

Las flores de Pascua prefieren las temperaturas suaves, no quieren congelarse ni morir de un golpe de calor, por lo que necesitarán estar bien protegidas los días en los que el frío aragonés no perdona. La que viste de rojo se ha convertido en la reina de la Navidad por excelencia, aunque hay poinsettias de tonalidades muy diversas. Detrás de sus fascinantes colores, hay un minucioso trabajo de cultivo, los profesionales emplean una sofisticada técnica perfeccionada a lo largo de los años para facilitarnos su cuidado.

Independientemente de tu decoración, la flor de Pascua es un elemento que encajará a la perfección en tu hogar esta Navidad y mantenerla en perfectas condiciones durante todas las fiestas es más sencillo de lo que piensas. Los expertos de Stars for Europe (SfE), la iniciativa que representa a los principales productores de poinsettia en 22 países europeos, te dan los mejores consejos para asegurarte de que sus brácteas conserven su distintivo color durante mucho tiempo.

1. Elige bien: las flores de Pascua son plantas tropicales y prefieren los ambientes cálidos, así que escoge las que estén situadas en el interior de las tiendas. Evita aquellas que estén cerca de las entradas o en el exterior, ya que las poinsettias no soportan las corrientes de aire frío.

2. Observa las hojas: una poinsettia sana no debería mostrar signos de amarilleo o caída de las hojas. Éstas tendrán un color verde uniforme y las brácteas destacarán por sus colores vivos e intensos.

3. Envuélvela para el camino: asegúrate de envolver bien la flor de Pascua para el viaje a casa. Esto la protegerá del frío y de cualquier ráfaga de viento. No las dejes mucho tiempo en el coche porque podría sufrir daños por las bajas temperaturas del invierno aragonés.

4. Estas flores prefieren un lugar luminoso, pero la luz solar directa y fuerte puede dañar las hojas. Así que busca lugares donde la luz sea filtrada y evita los rincones sombríos que puedan quitarle brillo a tu poinsettia.

5. Cuidado con la chimenea. Para combatir el frío del invierno es habitual encender la chimenea, quemadores de leña o radiadores, pero si quieres conservar tu poinsettia es mejor que la alejes de estos focos de calor.

6. Uno de los errores más comunes es ponerles demasiada agua, la moderación es clave: riégalas sólo cuando la tierra esté casi seca y evita a toda costa el encharcamiento de tu poinsettia.

El secreto está en las hojas

La flor de Pascua es muy expresiva y sus hojas muestran qué le puede estar pasando. Las hojas amarillas o colgantes nos indican que sus raíces están dañadas y la causa más común suele ser el exceso de agua, mientras que las hojas secas o decaídas avisan que hay una falta de riego.

Si la poinsettia pierde las hojas cuando éstas todavía están verdes puede deberse al aire frío o las corrientes de aire. Por último, si las hojas están manchadas o tienen las puntas marrones, la planta no tiene los nutrientes que necesita y deberás añadir regularmente un poco de abono al regarla.

Bonus tip: Para disfrutar de tus poinsettias durante el mayor tiempo posible, es recomendable comprarlas directamente en viveros o centros de jardinería, donde puedes pedir consejos más para su cuidado a especialistas.

Para más información visita la sección para periodistas: https://starsforeurope.com/es/